domingo, enero 08, 2006

NOCHE DE DICIEMBRE




Noche como ésta, y contemplada a solas
no la puede sufrir mi corazón:
da un dolor de hermosura irresistible,
un miedo profundísimo de Dios.
Ven a partir conmigo lo que siento,
esto que abrumador desborda en mí:
ven a hacerme finito lo infinito
y a encarnar el angélico festín.
¡Mira ese cielo!...
Es demasiado cielo
para el ojo de insecto de un mortal;
refléjame en tus ojos un fragmento
que yo alcance a medir y a sondear.
Un cielo que responda a mi delirio
sin hacerme sentir mi pequeñez;
un cielo mío, que me esté mirando,
y que tan sólo a mí mirando esté.
Esas estrellas..., ¡ay, brillan tan lejos!
Con tus pupilas tráemelas aquí
donde yo pueda en mi avidez tocarlas
y aspirar su seráfico elixir.
Hay un silencio en esta imnensa noche
que no es silencio;
es místico disfraz de un concierto inmortal.
Por escucharlo mudo como la muerte el orbe está.
Déjame oírlo, enamorada mía,
a través de tu ardiente corazón;
sólo el amor transporta a nuestro mundo
las notas de la música de Dios.
El es la clave de la ciencia eterna,
la invisible cadena creatriz
que une al hombre con Dios y con sus obras,
y Adán a Cristo, y el principio al fin.

De aquel hervor de luz está manando
el rocío del alma. Ebrio de amor
y de delicia tiembla el firmamento;
inunda el Creador la Creación.
¡Sí; el Creador!, cuya grandeza misma
es la que nos impide verlo aquí;
pero que, como atmósfera de gracia,
se hace, entre tanto, por doquier sentir...
Déjame unir mis labios a tus labios,
une a tu corazón mi corazón;
doblemos nuestro ser para que alcance
a recoger la bendición de Dios.
Todo, la gota como el orbe, cabe
en su grandeza y su bondad. Tal vez
pensó en nosotros cuando abrió esta noche,
como a las turbas su palacio un rey.
¡Danza gloriosa de almas y de estrellas!
¡Banquete de inmortales! Y pues ya
por su largueza en él nos encontramos,
de amor y vida en el cenit fugaz.
ven a partir conmigo lo que siento,
esto que abrumador desborda en mí;
ven a hacerme finito lo infinito
y a encarnar el angélico festín.
¿Qué perdió Adán perdiendo el paraíso,
si ese azul firmamento le quedó y una mujer,
compendio de Natura,
donde saborear la obra de Dios?.
¡Tú y Dios me disputáis en este instante!
Fúndanse nuestras almas,
y en audaz rapto de adoración,
volemos juntos de nuestro amor al santo manantial.
Te abrazaré, como a la tierra el cielo,
en consorcio sagrado;
oirás de mí lo que oídos mortales nunca oyeron,
lo que habla el serafín al serafín.
Y entonces esta angustia de hermosura,
este miedo de Dios que al hombre da el sentirse tan cerca,
tendrá un nombre, y eterno entre los dos: ¡felicidad!
Pieza maestra del romanticismo hispanoamericano, del colombiano Rafael Pombo

1 Comments:

Anonymous Anónimo said...

amiguiiii
ya nos keda la p de pepe pa salir
jajja lo siento no pude evitar ese comentario!
sabi ke,, estos dias he andado como angustiada,,,
he soñado muxas cosas ke no me gustaria ke ni kgando pasaran nunca
me da susto =(
ojala sea solo de estupdia ke pienso cosas asi...

sabi ke,,, te extraño despues de too este tiempo sin ti...
cuando me acuerdo de ecuaciones,, ke me kgaba de risa, o de calculo... fisico,,, etc... tantas weas buenas ke nos han pasado... y los malos ratos son solo por estupideces.... realmente te aprecio...
ojala destroces el otro semestre,,, porke al final,,, se supone ke es lo ke keremos,hay ke salir adelante con esta wea de carrera...

ahora ke cada uno anda en lo suyo, yo creo ke me he dado cuenta lo importante ke son los amigos para confiarle cosas y pasar momentos agradables,,, y con respecto a los cometarios mala onda sobre mi del curso o de los de tercero (ke tb me detestan), o sea mis actitudes no son de mala onda,,, solo kiero lo mejor pa mi, pa los demas y de forma honesta, transparente y ke cada uno merezca por sus propios esfuerzos. Yo se ke tu lo haces asi, asi ke no me preocupo, porke se ke llegaras lejos..

ya de nuevo me vole...
cuidate mxo
bsitos

naty

6:19 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home