Ansias de la Noche III
...
Comenzaba otro día más, la rutina apestaba ... no quería despertar, pero tampoco podía seguir durmiendo. Hacía mucho calor, corrí las cortinas era un día hermoso el sol encandilaba mi vista, los vidrios humedecidos por la condensación del aire de mi habitacion, abrí la ventana y sentí que se respiraba un aire fresco y suave, todo gracias a la lluvia del dia anterior pocas veces se podía respirar aire puro en esta asquerosa ciudad.
Al alejarme de la ventana vi el rastro de mis dedos en el vidrio, me recordaron lo que escribí en el la noche anterior, cuando el frío empañó los vidrios de la habitacion ... otra vez el recuerdo, una serie de imagenes pasaron por mi, recuerdos que nunca volverías, momentos hermosos y desastrosos, todo como una pelicula toda la historia más hermosa que vivió pero que ya había tenido su fín.
Tomé lo primero que encontre y me lo puse encima, me paré de la cama y baje a ver si había alguien en casa, creo que ese día tenía que ir a clases pero mi estado animico y mi rostro me decían que lo mejor era quedarse encerrado otro día mas. No tenía hambre, ni ganas de seguir durmiendo, menos de escuchar música o entrar al computador sólo necesitaba descargar todo lo que tenía dentro, ya lo había intentado de muchas formas, incluso aquellas con las que tanto lucho durante tiempo atras. Pero nada había dado resultado, ni si quiera la caja de antidepresivos que el amigo de Manuel me dió. No quería que nadie mas supiera lo que sentía, solo ella y nadie más, necesitaba desahogarme y poder decirle todo lo que sentía, quería que me ayudara que me diera una mano, en esos momentos en que más la necesite ella ... ella no estuvo conmigo.
Ya es muy tarde, y la gente aca en el parque ya esta llegando, parejas que vienen a ocultar sus romances en la oscuridad de los arboles y de la noche. Quiero levantarme de aquí y partír a mi casa, pero no sé ... tengo que ser fuerte y superar de una vez por todas todo esto. Tengo que recordarlo todo y saber por que mierda fuí un cobarde e intenté quitarme la vida.
El psicologo así lo había dicho; "vuelve a un lugar que te recuerde tus momentos con ella, sientate ahí donde pasaron horas juntos. Relajate y recuerda todo eso que te llevó a hacerlo ... y luego ... "
La mañana pasaba y en mí no quedaban mas que lágrimas secas de la noche anterior.
Era una sensación que no tiene ningún típo de descripción, sentír un vació en el alma que nada ni nadie te puede llenar, excepto una persona. Sentír que tu vida ahora es una mierda, que no deseas nada mas que sentír su aroma cerca tuyo, que a pesar de llevar casi un mes encerrado en cuatro paredes no quieres ver a nadie ni saber de nada. Dejar de lado tu propio futuro, y descuidar tu salud mental y física, sentir que hasta los días más calurosos son fríos y sin luz para tí, que el aire es cada vez más denso y que los recuerdos de lo que alguna vez fue ya jamás ... jamás volveran.
Estaba totalmente fuera de control, golpie las paredes hasta romperme la mano, patie el borde de mi cama, tomé lo primero que encontre y lo arrojaba lo mas fuerte posible ... me puse de rodillas exhausto, miré el suelo como cada segundo se mojaba aun mas a causa de mis lagrimas, ya no aguantaba más, mi vida era una mierda, mi vida en ese instante sin ella ya no valía nada.
Bajé lo más rápido posible, busque en el cajón de la pieza de mi madre y tomé la caja de antidepresivos y algunas tiras de medicamentos que estaban desparramadas por el cajón. Busqué un vaso con agua y regrese a mi pieza. Miré el reloj ... las 1:04 pm ... aún había tiempo para hacerlo, los demas llegarían al rededor de dos horas más.
Me sento agitado como aquella vez, el corazón late cada vez más fuerte, una punzada me hace ponerme de pie. Me apreto el pecho lo más fuerte que pudo, tengo miedo. Miró al rededor y la mujer que esta con ese señor me mira con cara de preocupación, giro mi cuerpo cosa que ella no pueda verme, algo me estaba pasando y es muy similar a lo de la vez anterior. A pesar de esto tengo que continuar recordando ...
Ahí estaban, pensé " es tan simple solo tomalas y todo terminará". Mire mis manos, estaban temblando al igual que el resto de mí, no podía sentir nada mas alla de mi alrededor, mi mente creo un espacio exclusivo para mi angustia y mi desesperación ... el corazón latía cada vez más fuerte, podía escuchar y sentir como lo hacía. Traté de mantener la calma, miré la caja de antidepresivos y me di cuenta de que solo habían dos tiras de diez capsulas cada una, más las otras que encontré esparicidas por ahí ... no alcanzaba a intoxicarme con ellas. Traté de pensar en ese momento de desesperación y recorde mi problema cardiaco ... quizás si me probocaba una especie de taquicardía este no soportaría. Mi mente estaba completamente fuera de control al igual que yo. Rompí las tiras y saque cada una de las pastillas de ellas, las puse en el suelo humedecido, las junté y poco a poco me las iba ingresando a la boca ...
Necesito calmarme, sé que esto me hace mal, quizás sea demasiado pronto para recordarlo todo, además este lugar ...
Por un instante me detube con las pastillas en la boca, desesperado por lo que estaba haciendo intente sacarmelas y escupirlas, pero algo me impedia hacerlo, rompí en llanto, ya era demasiado tarde para cualquier tipo de remordimiento o de escapatoria. Sólo me quedaban tres pastillas en el suelo y el vaso de agua se había acabado, tomé un respiro puse mis brazos contra el suelo y golpeaba y golpeaba maldiciendo mi vida y mi inútil existencia. Debía terminar con lo que comencé, tome una a una las tres pastillas, y mientra las lagrimas corrían por mi rostro, las ingresaba a la boca y las tragaba lentamente, sientiendo el miedo espantoso que causaba la sensación de la muerte.
Cuando quedaba sólo la última empesé a recordar a todas las personas que amaba ... a mis padres, hermanos amigos a ella...
a la que le entregué mi corazón por completo, a la que le entregue mi vida, mi pasado presente y futuro, a la única persona que he amado con todo el alma y con toda mi ser. A esa persona que a pesar de amarme y saber que le amaba decidió terminar nuestro cuento mágico para vivir una vida solitaria alejada de mi.
Por ese instante, las lagrimas se detuvieron, y una sonrisa se esbozó de mí.
Había sido un estupido, un egoista y un loco que no supo aceptar que ella necesitaba estar bien "sóla", había cometido un error gravisimo ... pero ya era demasiado tarde para dar vuelta atras.
Esta es la quinta punzada en menos de cinco minutos, pero ya había terminado. Era hora de pararme de este lugar y terminar con lo que comencé hoy, no ... con lo que comencé hace tres meses.
El amigo de manuel tenía razón, tenia que recordarlo todo y más aun en este lugar ...
Puedo sentir como ya me siento mejor, me siento mas liviano, siemplemente más tranquilo con un peso que poco a poco va quedando atras. Solo falta algo ...
"vuelve al lugar que te recuerde tus momentos con ella, sientate ahí donde pasaron horas juntos. Relajate y recuerda todo aquello que te llevo a hacerlo ... y luego ... y luego escribelo y muestraselo al mundo".
Comenzaba otro día más, la rutina apestaba ... no quería despertar, pero tampoco podía seguir durmiendo. Hacía mucho calor, corrí las cortinas era un día hermoso el sol encandilaba mi vista, los vidrios humedecidos por la condensación del aire de mi habitacion, abrí la ventana y sentí que se respiraba un aire fresco y suave, todo gracias a la lluvia del dia anterior pocas veces se podía respirar aire puro en esta asquerosa ciudad.
Al alejarme de la ventana vi el rastro de mis dedos en el vidrio, me recordaron lo que escribí en el la noche anterior, cuando el frío empañó los vidrios de la habitacion ... otra vez el recuerdo, una serie de imagenes pasaron por mi, recuerdos que nunca volverías, momentos hermosos y desastrosos, todo como una pelicula toda la historia más hermosa que vivió pero que ya había tenido su fín.
Tomé lo primero que encontre y me lo puse encima, me paré de la cama y baje a ver si había alguien en casa, creo que ese día tenía que ir a clases pero mi estado animico y mi rostro me decían que lo mejor era quedarse encerrado otro día mas. No tenía hambre, ni ganas de seguir durmiendo, menos de escuchar música o entrar al computador sólo necesitaba descargar todo lo que tenía dentro, ya lo había intentado de muchas formas, incluso aquellas con las que tanto lucho durante tiempo atras. Pero nada había dado resultado, ni si quiera la caja de antidepresivos que el amigo de Manuel me dió. No quería que nadie mas supiera lo que sentía, solo ella y nadie más, necesitaba desahogarme y poder decirle todo lo que sentía, quería que me ayudara que me diera una mano, en esos momentos en que más la necesite ella ... ella no estuvo conmigo.
Ya es muy tarde, y la gente aca en el parque ya esta llegando, parejas que vienen a ocultar sus romances en la oscuridad de los arboles y de la noche. Quiero levantarme de aquí y partír a mi casa, pero no sé ... tengo que ser fuerte y superar de una vez por todas todo esto. Tengo que recordarlo todo y saber por que mierda fuí un cobarde e intenté quitarme la vida.
El psicologo así lo había dicho; "vuelve a un lugar que te recuerde tus momentos con ella, sientate ahí donde pasaron horas juntos. Relajate y recuerda todo eso que te llevó a hacerlo ... y luego ... "
La mañana pasaba y en mí no quedaban mas que lágrimas secas de la noche anterior.
Era una sensación que no tiene ningún típo de descripción, sentír un vació en el alma que nada ni nadie te puede llenar, excepto una persona. Sentír que tu vida ahora es una mierda, que no deseas nada mas que sentír su aroma cerca tuyo, que a pesar de llevar casi un mes encerrado en cuatro paredes no quieres ver a nadie ni saber de nada. Dejar de lado tu propio futuro, y descuidar tu salud mental y física, sentir que hasta los días más calurosos son fríos y sin luz para tí, que el aire es cada vez más denso y que los recuerdos de lo que alguna vez fue ya jamás ... jamás volveran.
Estaba totalmente fuera de control, golpie las paredes hasta romperme la mano, patie el borde de mi cama, tomé lo primero que encontre y lo arrojaba lo mas fuerte posible ... me puse de rodillas exhausto, miré el suelo como cada segundo se mojaba aun mas a causa de mis lagrimas, ya no aguantaba más, mi vida era una mierda, mi vida en ese instante sin ella ya no valía nada.
Bajé lo más rápido posible, busque en el cajón de la pieza de mi madre y tomé la caja de antidepresivos y algunas tiras de medicamentos que estaban desparramadas por el cajón. Busqué un vaso con agua y regrese a mi pieza. Miré el reloj ... las 1:04 pm ... aún había tiempo para hacerlo, los demas llegarían al rededor de dos horas más.
Me sento agitado como aquella vez, el corazón late cada vez más fuerte, una punzada me hace ponerme de pie. Me apreto el pecho lo más fuerte que pudo, tengo miedo. Miró al rededor y la mujer que esta con ese señor me mira con cara de preocupación, giro mi cuerpo cosa que ella no pueda verme, algo me estaba pasando y es muy similar a lo de la vez anterior. A pesar de esto tengo que continuar recordando ...
Ahí estaban, pensé " es tan simple solo tomalas y todo terminará". Mire mis manos, estaban temblando al igual que el resto de mí, no podía sentir nada mas alla de mi alrededor, mi mente creo un espacio exclusivo para mi angustia y mi desesperación ... el corazón latía cada vez más fuerte, podía escuchar y sentir como lo hacía. Traté de mantener la calma, miré la caja de antidepresivos y me di cuenta de que solo habían dos tiras de diez capsulas cada una, más las otras que encontré esparicidas por ahí ... no alcanzaba a intoxicarme con ellas. Traté de pensar en ese momento de desesperación y recorde mi problema cardiaco ... quizás si me probocaba una especie de taquicardía este no soportaría. Mi mente estaba completamente fuera de control al igual que yo. Rompí las tiras y saque cada una de las pastillas de ellas, las puse en el suelo humedecido, las junté y poco a poco me las iba ingresando a la boca ...
Necesito calmarme, sé que esto me hace mal, quizás sea demasiado pronto para recordarlo todo, además este lugar ...
Por un instante me detube con las pastillas en la boca, desesperado por lo que estaba haciendo intente sacarmelas y escupirlas, pero algo me impedia hacerlo, rompí en llanto, ya era demasiado tarde para cualquier tipo de remordimiento o de escapatoria. Sólo me quedaban tres pastillas en el suelo y el vaso de agua se había acabado, tomé un respiro puse mis brazos contra el suelo y golpeaba y golpeaba maldiciendo mi vida y mi inútil existencia. Debía terminar con lo que comencé, tome una a una las tres pastillas, y mientra las lagrimas corrían por mi rostro, las ingresaba a la boca y las tragaba lentamente, sientiendo el miedo espantoso que causaba la sensación de la muerte.
Cuando quedaba sólo la última empesé a recordar a todas las personas que amaba ... a mis padres, hermanos amigos a ella...
a la que le entregué mi corazón por completo, a la que le entregue mi vida, mi pasado presente y futuro, a la única persona que he amado con todo el alma y con toda mi ser. A esa persona que a pesar de amarme y saber que le amaba decidió terminar nuestro cuento mágico para vivir una vida solitaria alejada de mi.
Por ese instante, las lagrimas se detuvieron, y una sonrisa se esbozó de mí.
Había sido un estupido, un egoista y un loco que no supo aceptar que ella necesitaba estar bien "sóla", había cometido un error gravisimo ... pero ya era demasiado tarde para dar vuelta atras.
Esta es la quinta punzada en menos de cinco minutos, pero ya había terminado. Era hora de pararme de este lugar y terminar con lo que comencé hoy, no ... con lo que comencé hace tres meses.
El amigo de manuel tenía razón, tenia que recordarlo todo y más aun en este lugar ...
Puedo sentir como ya me siento mejor, me siento mas liviano, siemplemente más tranquilo con un peso que poco a poco va quedando atras. Solo falta algo ...
"vuelve al lugar que te recuerde tus momentos con ella, sientate ahí donde pasaron horas juntos. Relajate y recuerda todo aquello que te llevo a hacerlo ... y luego ... y luego escribelo y muestraselo al mundo".